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Ojalá que los veintitrés hagan que la vida sea más clara

o que aparten un poco las nubes grises que habitan sobre mí.

Quiero reventar cada nube

y dejar de arruinar todo lo demás,

quiero dejar que la lluvia me inunde

solo para que el sol se sienta bien sobre mi piel después.

Me he estado sintiendo en pausa

solo porque no entiendo nada,

siempre quiero gritar

solo cuando me encuentro afónica.

Nuestro cielo azul supo como despejarme

y luego cambiaron las formas de las nubes,

el cielo me supo romper

y entre las lágrimas me ahogué,

sé que estaré bien,

tal vez esto solo es fe.

He estado trepando entre mis sonrisas

y aún no llego a la cima de mi alegría.

Tal vez debería tallar en piedras

en vez de tropezarme tanto con ellas.

Encontré un pozo de los deseos

y estaba seco,

¿cómo puedo creer en algo

cuando no hay nada?

No sé cómo darle vida a esta primavera,

tal vez solo deba acostarme en el pasto y sentir,

nada más sentir,

sentirlo todo.