Hoy mis manos me tiemblan
y temo no poder sostenerte fuerte.
Hoy me quiero vestir de plumas,
pero la tinta se ha secado
y mi disfraz de poeta se ha caído,
temo no encontrar una palabra
que te pueda levantar.
Hoy mi silencio no es por vergüenza,
es por impotencia de no saber que expresar.
Ojalá tuviera aquella magia para hacerte sentir bien,
pero todo lo que escribo parece una burla para tu sufrir
y desearía estar ahí ahora que estás ausente de ti.
Eres un fantasma,
una herida abierta,
te estoy perdiendo
y mis lágrimas piden calmar tu dolor.
Mis letras hoy tropiezan
porque tú estás cayendo
y no sé como levantarte.
Hoy mis palabras no significan nada
porque no sé como te sientes,
tu corazón roto, parece que no hay latidos que te acaricien.
Hoy mi tinta se oscurece
y desearía que tú pudieras ver la luz del día,
pero hasta las estrellas harán más que yo,
te acompañarán en tu noche más solitaria.
Hoy odio ser poeta
porque no encuentro palabras para ti.
Hoy odio escribir,
porque tu historia está detenida
y no puedo expresarme sobre otro inicio
ante tu tormentoso final.
Te pierdo entre la oscuridad
y he prendido el farol,
pero solo puedo ver tus pisadas
cuando solo quiero ver tu mirada,
ojos llenos de lágrimas,
no seré yo quien diga que no llores.
Me rompería en mil pedazos
si hubiera una pieza en mí
que valiera la pena para ti.
Hoy la tinta se seca
y la hoja permanece vacía,
hoy no me alimento del dolor,
solo vomito de tristeza.
Hoy me haces dar cuenta
que la poesía es una mentira,
porque no encuentro palabras para hacerte sentir mejor.
Hoy mi cobija no quiere arroparme,
porque eres tú quien necesita ese calor.
Rómpete,
sostendré tus pedazos.
Grita,
seré tu silencio.
Llora,
siente…
No tengo palabras,
así que me quedaré en silencio
y te escucharé,
desahógate conmigo.
Escribí esta poesía hace unos días para alguien a quien quiero y aprecio mucho, ya que él estaba (y sigue) pasando por una situación difícil, le mandé un mensaje, pero aún no lo abre. Ayer soñé que nos encontrábamos en la calle y él lloraba mientras me abrazaba, se sintió tan real, ojalá ese no hubiese sido un sueño.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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"Mis letras hoy tropiezan
porque tú estás cayendo
y no sé como levantarte."
Desde la primera vez que leí esta poesía me sentí tan identificada con ella, me movió tantos recuerdos, tantos sucesos que han pasado en mi vida. Tanto el no poder comprender tantas cosas que personas cercanas a mí intentaban hacerme sentir, no podía escuchar. Así como la parte de querer decir e intentar escribir lo que mi corazón trataba de mostrar, para hacer sentir bien y darle un incentivo para vivir a una de las personas más importantes en mi vida y me dolía hasta el alma que nada de lo que dijera e incluso ni mi mirada, ni mi mejor abrazo pudiera sanar. La veía caer…