De pequeña creía que la luna me perseguía a casa,
pero yo fui quien la buscaba cuando quería saber de ti,
era en la única que podía confiar,
ya que ella sabe de hombres que dejan huella una vez
y son recordados por siempre.
De pequeña creí que la luna me perseguía a casa,
tal vez solo necesitaba a alguien que se preocupara por mí
y en quien yo pudiera confiar.
La luna está al alzar mi mirada
haciendo crecer mi alma.
De pequeña creí que la luna me perseguí a casa,
cuando crecí entendí su soledad,
le entregué todas mis noches
y cuando ella estaba llena, yo le sonreía,
pero me enseñó que se puede sangrar
y ser admirada o amada a pesar de estar herida.
Realmente nunca conoceré ni una parte significativa del universo,
pero entiendo la dimensión del amor de la luna hacia el sol,
La luna es el faro de la noche por su amado,
porque éste se perdió un día.
Tal vez la luna no quiera poseer tantas estrellas a su alrededor,
tal vez prefiera tener rayos de luz para ser parecida a su amor, el sol.
Nadie ha dicho que la luna está rota,
solo hablamos de su lejanía,
facetas, soledad, heridas y oscuridad.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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