El agua se ve tan quieta,
tan inocente,
tan llena de vida,
parece que no puede provocar la muerte,
pero es un liquido
que puede ser veneno,
una gota puede hacernos derramar lo que teníamos en el vaso
o ahogarnos por sumergirnos en él.
Hay agua en las tormentas,
en las mareas
incluso en nuestros ojos,
se puede hacer un desastre con ella.
A pesar de ser 70% agua
a veces parecemos un desierto
o que estamos estancados.
No estamos sedientos
y queremos beber más
hasta ahogarnos.
Nos resbalamos como el agua,
a pesar de ser cristalina
no nos podemos quebrar
y eso es bueno,
pero de todas maneras
nos hacemos mal.
Quédate ahí guardada en la vitrina,
tan cerca de mí que te puedo sentir, pero no tocar,
quiero ser como ese niño
que al ver puede imaginar,
sus ojos se iluminan
y en su cielo nace otra estrella,
aquel niño que querrá jugar,
pero preferirá disfrutar, amar
y desear de lejos
porque quiere protegerse del daño que puede causar.
A de agua,
A de amor,
sé que ambos pueden darte vida,
pero también pueden quitártela
y prefiero amar de lejos,
admirar y contemplar,
imaginar y soñar
en vez de vivirlo
porque tengo miedo de no saberlo cuidar.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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