Tengo pocos colores
y estoy dispuesta a pintar tu cielo.
Mi hilo no es demasiado,
espero que sea suficiente para coserte.
Me encanta la lluvia,
pero detesto que lluevas cuando no estoy ahí
para atrapar cada lágrima
y hacerte sonreír mientras nos reímos
de cualquier estupidez.
Me encanta la lluvia,
pero detesto que lluevas cuando no estoy ahí,
tu cara agachada
y tus manos limpiando tus lágrimas,
tengo que atrapar cada gota
y tomarte de la mano para levantarte,
ojalá podamos alcanzar la felicidad que te está esperando,
pero te sientes impotente por lo que está pasando.
Haré compañía en tu soledad
y llenaré cada grieta
mientras gritas con dificultad.
Odio que lluevas
cuando no estoy ahí,
no quiero disfrutar de la lluvia,
solo quiero que aprecies la vida
que aunque a veces es difícil,
es digna de vivir.
Tengo pocos colores
y tienes demasiado espacio para colorear,
saldré de las líneas
porque los límites no son para quienes somos.
Pintaré tu cielo
mientras tu alma y ojos
vuelvan a brillar.
Llenaré cada espacio
y disminuiremos la tristeza.
El color de tus ojos
ni siquiera importan ahora,
me duele verlos tan opacos,
es triste ver como has dejado de brillar,
eres una luz que vale la pena conservar,
eres la guía para alguien más
aunque estés perdida y destruida.
Tus pies siguen avanzando,
y a veces te vas arrastrando,
estas dudando si es el camino correcto,
cada paso duele,
pero la huella es tan maravillosa.
Cada color lo usaré en ti,
porque tu vida se quedó en un triste color,
mereces llenarte de vida
y completar los espacios de cada color,
que sean tan suaves como tu alma
y tan fuerte como tu corazón.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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