Tanto mirar hacia abajo
nos hizo caer hasta acá,
voltear al cielo
no nos hará volar.
Queremos volver
y cada noche dormimos en almohadas
esperando que sean del material de las alas,
soñar para volar.
Volamos cada noche imaginando
¿cómo sería tocarlo?
¿cómo nos sentiríamos al tener su tacto?
El cielo es nuestro hogar
y hemos hecho un infierno
tratando de enamorarnos de demonios
que hagan aparecer el ángel que hemos sido,
¿Vale la pena?
¿Por qué no nos arriesgamos realmente?
He perdido mis días
y no he ganado nada de mi vida.
El cielo ha sido una promesa
y nos hemos estado rompiendo
tratando de llegar allí,
nos aceptarán incompletos y locos,
somos nosotros quienes nos rechazamos
por lo que somos y por lo que tenemos.
No me gusta el cielo por lo inalcanzable,
no es mi amor imposible.
Aunque soy amante de las estrellas y de la luna también,
no me gustan por ser lejanas,
me agradan porque me hacen sentirme cercana a mí misma
aunque no esté, aunque no sea,
contemplándolas, hasta en mi peor desastre,
puedo admirarme.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
Puedes encontrarme en:
Facebook: /anammirandam
IG: /anmirmartz
Telegram: anmirmartz
Comments