El mismo deseo
No he visto ninguna estrella fugaz,
pero a todas las estrellas
les pido el mismo deseo
para cuando la estrella fugaz pase
le cuenten mi deseo.
Las velitas de cumpleaños
se apagan solas,
no les necesito soplar,
ya saben de memoria mi deseo,
no necesitan que se los pida una vez más,
sigue(s) siendo el mismo sueño.
Las navidades
han perdido su magia,
ya no estoy ilusionada,
los regalos ya no están en el árbol
y la familia ya no cena en la mesa
en esa noche tan especial
que era la más importante
para cada uno de nosotros.
La mesa de mi casa
fue hecha para todos,
recuerdo cuando estaba llena
y de más espacios se necesitaban,
ahora hay vacíos
y nada me esta llenado.
Las luces navideñas
no están brillando,
la falta de ilusión
las está apagando,
los adornos se están empolvando
y la comida se está enfriando.
Espero para pedir mi deseo de navidad,
pero no creo en los milagros navideños,
me he olvidado de la navidad
y cada sensación que tenía,
así que sé que no me cumplirá el deseo que tanto adoro.
Las 11:11 son mi minuto de ilusión,
siempre que puedo pido el deseo,
dicen que desperdicio de mi tiempo,
pero lo sigo haciendo,
quizá las 11:11 no lo vaya hacer realidad,
pero espero algún día verlo en mi realidad.
Quizá detrás de todos mis mismos deseos,
pido la paciencia para esperarlo,
la fortaleza para lograrlo,
para que en mi realidad para verlo realizado.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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