Perdón
por mis noches de desvelo,
donde te muestro mi oscuridad
y soy distante como la luna
o cuando estoy en una de sus facetas
donde no me encuentro completa
y rompo tu noche,
pero sé que nuestro cielo sigue intacto.
Perdón
por apagarme
cuando debo iluminarte,
es tan radiante tu amor…
tus rayos de luz llegan
y llenan mis vacíos,
te amo demasiado,
haces música en cada uno de mis latidos.
Perdón
por ser lejana como la luna
en vez de mostrarte mis estrellas
y conectar sus puntos
hasta hacer historia.
Tú me ves como el cielo,
pero contigo puedo sentirlo,
me haces ser infinita,
me contemplas en nuestro silencio,
pero me admiras a gritos,
me llenas de calma
aun cuando estoy siendo tormenta.
Contigo los atardeceres son más hermosos,
tú los pintas con tus ojos,
tú detienes el tiempo
para que apreciemos el momento,
para capturarlo y llevarlo muy dentro de nosotros.
Contigo los amaneceres son más hermosos,
le das sueños al sol
y con sus rayos
hace más brillante al día
que tú decides vivir.
Contigo los anocheceres son más mágicos,
las estrellas se alinean a tu destino
y caen para que pidas tu camino.
Gracias por todo,
mamá.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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