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Foto del escritorANMIR MARTZ

La amada inmóvil (Amado Nervo & Amada Ana)

Este dolor palpita

y en el corazón no queda nada más,

el amor que tuvimos recorre todo mi cuerpo

buscando que tu mano pueda tocarlo

o tratando de deslizarse por tu piel como una dulce caricia

y no te encuentro aun sabiendo en dónde habitas.


Ya no me quedan lágrimas,

este sufrir no cesa.

Apenas comienza esta vida sin ti

y la muerte parece que es para mí.

A veces una década puede ser una eternidad,

yo siento que merecíamos más,

le grito a Dios esperando que tu espíritu

también pueda escuchar mi dolor,

¿entiendes mis sollozos?


¡Qué desgarrador es el cuerpo sin tus caricias!

Y este andar no me lleva a nada,

sé que si me aviento de este abismo,

llegarás como una nube tratando de amortiguar la caída,

pero déjame caer, que quiero llegar hacia donde tú estás.


Vida mía,

¿por qué te fuiste

y no me llevaste?

Estoy seguro que de este sepulcro

yo soy el muerto,

porque este aire sin ti me está asfixiando.

Conocerte fue cambiar mi destino,

ahora sin ti no sé cuáles son los planes.

Ya no me quedan lágrimas,

ya no me queda nada.

Dejaré que el viento me murmulle sobre ti,

que las hojas en los árboles sean como los latidos

que se aferraron a tu corazón,

ha llegado el otoño,

este aire es por la falta de tu respirar.

Creeré que el primer canto del pájaro

está emocionado por el alba

y su canción pronuncia lo mismo que me decías

cuando aún despertabas a mi lado…

ahora yaces en otro lado

y los buenos días se fueron junto con tu vida.

¡Y qué mal sabor de boca habita en mí

al saber que no podré besar nunca más!


El pájaro se quedó

solo porque se congeló,

ya nada me habita,

ya nada queda,

todo me abandonó

con tu adiós,

¿y dónde demonios está Dios?


Amor mío,

una estrella me sonrió

cuando le lloré a la luna,

¿en qué parte del espacio estás?

Me niego que te quedes en este vacío mío.

¡Amor mío,

fuimos nuestros

y qué bonitos fuimos!


Ojalá me quieras en el más allá

porque hasta allá te iré a buscar.


Somos dos,

no olvides.

Fuiste tú,

toda mi vida

eres y serás.

Fui yo

al menos

hasta tu último día.

Guárdame en tu alma,

que lo único que queda de mí eres tú.

Estoy luchando con esta vida

por haberme dado tu muerte

tan de repente.

¿Cómo será la vida en el más allá?

Mientras tú estés allá, nada me faltará,

porque quién necesita de un corazón palpitante

cuando su amor persiste en el paraíso de los muertos.


Duermes eternamente,

aunque has dejado de soñarme,

de despertarme para vivirme.

Te llevo flores sabiendo que no verás

la próxima primavera,

no estarás más,

al menos te salvarás de este invierno

que ha congelado mis huesos.


Me dejas sufriendo

y no acudes a mis lágrimas.

Me dejas roto

y lo peor, solo,

sin ti, amor.

Un amor como el tuyo jamás volveré a encontrar

y todos se perderán buscando un amor como el nuestro.


Amor, amor,

te fuiste hoy

y de nada me sirve el calendario,

pues sé que no volverás.


Confiaré en que existe la otra vida

solo para tener fe en que te encontraré después,

prometo entregarme,

te daré todo lo que ya no tengo,

voy a llenar los vacíos que hoy dejas

y seré tu fiel compañero por siempre

para que nunca sospeches de la ausencia

que hoy me asecha.

Me está cansando tu reciente eternidad,

amor eterno, no puedo dejarte de amar

y tu falta no me hará buscar más,

prometo encontrarme y ser,

pero hoy déjame sufrir por esta vida que llegó a su fin,

por ti.


Créditos de la ilustración a: Miles Johnston (@miles_art)

 

Hoy comencé (y terminé) de leer un poemario de Amado Nervo y lo ando amando. Bastante poética su poesía, realmente amé cada página y su historia. De una de las Antologías Poéticas de él, la sección de La Amada Inmóvil, me llegó y rompió, fue un poemario de él escrito de 1912 a 1914, por aquel amor que Ana (en memoria de ella) le brindó desde que se encontraron (31 de agosto de 1901) hasta que ella partió de la vida (7 de enero de 1912), quedándose en la vida de él, de otra forma. Así que hice esta poesía con honor a ellos.


Compartiré nada más algunos versos de él para ella:


“Hoy que partió por siempre el amor mío,
no me importan los astros, pues sin ella
para mí el universo está vacío.
Ella que iba conmigo de la mano,
es hoy lo más lejano:
Los astros están cerca, pues los veo”

“Si en el mundo fue tan bella,
¿cómo será en esa estrella
donde está?
¡Cómo será!”


Me besaba mucho, como si temiera
Irse muy temprano… su cariño era
Inquieto, nervioso.
Ella presentía que era corto el plazo
(…) quería dejarme su alma en cada abrazo,
Poner en sus besos una eternidad”

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1 Comment


Ana Mercedes MA
Ana Mercedes MA
Jun 12, 2022
"Amor mío,
una estrella me sonrió
cuando le lloré a la luna,
¿en qué parte del espacio estás?
Me niego que te quedes en este vacío mío".

Me encantan todas tus poesías, pero esta tiene un toque diferente, pero hermoso, porque te basas en un sentir de otra persona, en la historia de otros amores, que me imagino te transmitieron esa sensación y esta inquietud de escribir. El amor tiene su magia, y a veces es fácil sentirlo respirar como si estuviera cerca de nosotros.

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