La historia de mi poesía
- ANMIR MARTZ
- 25 jul 2020
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 23 abr 2022
Empecé a escribirle a ojos negros
y terminé escribiendo sobre chicos con ojos cafés.
Empecé a escribir porque siempre fui demasiado lejana,
incluso mis amistades más cercanas dicen que no me conocen,
una hoja de papel estaba cerca de mí,
me quité mi disfraz y dejé caer mis armaduras,
jamás había sido tan libre como cuando tomé la tinta
y dejé ir las palabras que estaban colgando de un hilo,
haciéndome sentir rota.
Vi un papel en blanco en mi escritorio
y me empecé a desnudar
mientras me manchaba de tinta,
porque en ese tiempo, había tantas cosas que no quería que nadie viera.
Escribí cartas sin destinatario
porque con alguien tenía que expresarme,
cuando me di cuenta que estaba sola
empecé a romper la carta,
no el papel, sino a mis palabras,
las acomodé en versos y estrofas formando poesía,
porque quería olvidar mi vacío,
entonces publiqué alguna que otra frase
en el lugar donde nadie me conocía,
Luis fue la primera persona que me leyó,
le gustó mi expresión
y me di cuenta que no escribía para el vacío,
solo sobre mi vacío,
él me compartió de su luz, pero seguía siendo una sombra,
pero si no fuera por él, tal vez no estaría compartiendo mi poesía.
Recuerdo cuando tenía 11 años,
mi mamá me mostró la poesía que le escribió a mi papá,
el papel era demasiado amarillo
como la falda que ella que tenía puesta cuando lo conoció,
ella estaba leyendo un libro clásico para su clase de literatura,
supongo que se inspiró demasiado
y comenzó a escribirle poemas desde 1984,
su historia está llena de cartas y tarjetas de amor,
mis poesía de amor siempre han sido para amantes del futuro
y alguna que otra ilusión del pasado que no duró demasiado.
Cuando leí las poesías de mamá me enamoré de su expresión,
pero ella siempre ha sido un corazón abierto,
yo ya conocía sus sentimientos,
no me sé ninguna de mis poesías,
pero a veces recitó su poesía enamorada ¿de qué?,
yo jamás tuve una respuesta sobre el amor,
pero escribí sobre aquel ser que me hacía creer o querer amar.
A mis 12 años le dije a mi mamá que yo jamás escribiría poesía,
en ese tiempo yo solía escribir historias,
ahora no hay prueba de ninguna de ellas,
pero en mis poesías también cuento historias,
a veces del corazón otras veces solo provienen de mi mente,
he crecido con inspiración y la mejor parte de crecer
ha sido darme cuenta de mis cambios ante mi poesía.
Empecé a escribir aun cuando mi mano
estaba temblando sosteniendo el lápiz
y dejé ir en palabras todo lo que sentía,
así fue como caí en la poesía y al final fue la poesía quien me sostuvo.
Tenía 13 años cuando mi corazón se rompió,
jamás me asustó el crecer,
pero tuve tanto miedo de enfrentar el mundo sola, sin mi abuela.
Hubo demasiado caos en casa,
el verano del 2012 me dejó demasiadas quemaduras
y luego me sentí en el infierno,
le grité al diablo porque Dios no me escuchaba.
Tenía 13 años cuando mi corazón se rompió,
había demasiado caos en casa,
mi mamá estaba ausente mientras pedía como deseo un milagro,
que la presencia de mi abuela durará más,
pero había terminado ya.
Aldair y yo peleábamos por todo,
Neymar era el único que estaba para mí.
Mi casa era un caos,
faltaba mi mamá
y cuando mi abuela se fue,
el caos creció
mientras yo me hacía pequeña,
jamás me pude despedir de mi abuela
y en una de sus últimas conversaciones con mi mamá le dijo
que no olvidaba lo que tenía pendiente conmigo,
mi corazón se rompe al pensar en el verano que compartí con ella,
a su habitación no entraba el sol
y siempre estaba llena de personas que la querían,
pero el amor no es suficiente la mayor parte del tiempo,
menos cuando el cáncer está demasiado avanzando.
Ella siempre será mi Alba,
pero en mi oscuridad empecé a escribir.
Cuando mi imperio cayó
jamás creí construir un rincón poemario.
Me sentí sola por mucho tiempo,
tal vez porque en la infancia hubo personas que me alejaron.
Jamás deseé estar con alguien,
pero necesitaba ser cercana a mí misma,
necesitaba mi calor, entonces el hielo de mi ser empezó a arder.
No tenía con quien hablar,
así que empecé a escribir para desconocidos
y a la vez empecé a conocerme justo ahí.
Jamás escribí para me leyeran,
el compartirte mis letras
solo es mostrarte que soy libre,
finalmente.
Lloré por cada palabra que jamás dije
y fue la poesía lo que me limpió,
aun cuando soy demasiado torpe y siempre me mancho de tinta.
Lloré por cada palabra que jamás dije
fui el más grande océano
y fue la poesía mi salvavidas,
cuando floté me di cuenta de la profundidad
y empecé a escribir sobre cada gota.
Lloré por cada palabra que jamás dije,
fui el más grande océano
y fue la poesía el faro,
lo que hizo saber que estaría a salvo.
Llegué a la costa,
escribir en la arena fue tan efímero
y estaba harta del silencio,
así que empecé a escribir en hojas de papel
y allí comencé a ser.
Me ahogué en todas las lágrimas que siempre acumulé
y el agua se convirtió en tinta,
incluso siendo mi peor época,
nunca me sentí mejor como en ese momento.
Escribí con la sangre de mis heridas,
la poesía me sanó,
hoy estoy mejor.
La poesía me sanó y salvó,
es lo que me hace ser mejor
y no cambiaría nada de mí
porque sé que en la poesía puedo ser todo
y a la vez, expresarme sobre mi nada.
Sé que dije que jamás estaría en un amor posesivo,
pero todas mis letras le pertenecen a mi poesía.
Sé que dije que jamás estaría en un amor posesivo,
pero yo soy de mi poesía.
Le entregué mi ser a la poesía
cuando no sabía que había en mí.
Le entregué a mi ser a la poesía
y ella me dio todo para ser.
No sé si tenga la capacidad para hacer sentir algo a alguien con mis letras,
pero yo seguiré escribiendo hasta que el cielo caiga sobre mí,
el sentirme en el infierno una vez me ayudó a escribir,
así que no tengo miedo, la poesía me liberó.
Así que quiero agradecerle a Luis,
sin él sé que no estaría aquí,
mi poesía sería una mancha
y yo seguiría siendo una sombra
temiéndole a la luz,
él me hizo creer en mí
y confiar en mis letras
hasta escribir que todo estaría bien.
Así que quiero agradecerle a mi mamá
por ser mi primer paso hacia a la poesía
y acompañarme en cada letra.
Por ser lo mejor de mi sangre
y quien me hizo sentirme querida
cuando estaba herida,
por darme hojas de papel y tinta,
por hacerme ver que la poesía es más que palabras,
y hacerme saber que aquello que grabas en el papel
estaba tatuado primero en el alma.
Así que gracias a Eduardo
porque buscó una palabra y encontró una de mis frases,
leyó mi poesía y me habló aun cuando posiblemente ya conocía todo de mí,
a él le he dicho cosas que a nadie más le he había dicho
porque me permitió expresarme
y ser como nunca nadie más me lo permitió antes.
Gracias también a él por permitirme mostrarle mi parte estúpida
y porque de nuestras conversaciones profundas siempre se crean poesías.
Así que gracias a la muñequita
por leerme y siempre permitirme expresarme,
es mi amistad más valiosa
y aprecio bastante que se emociones con mis letras,
aún no encuentro las palabras para expresar lo que es para mí,
pero ella es de las pocas personas que siempre le he expresado mis sentimientos y mostrado mi alma,
lo más importante ya lo sabe, sabe que la quiero.
Así que gracias a aquellos que me leyeron en el rincón que se destrozó,
sobretodo a aquellos que admitieron que me leían
aun cuando tenían miedo de mi reacción
porque habían descubierto mis secretos,
de alguna manera me hicieron sentir a salvo,
porque ya no tenía por que tener miedo.
Así que gracias a aquellos que les escribí,
creo que la lista sería demasiado larga
y hay demasiados nombres que no me atrevo a escribir
aun cuando expresé en poesías más de lo que debía.
Gracias a mis amistades que recuperé
y amistades que he perdido.
Gracias a los amores
y no tan amores.
Gracias a mis ilusiones
y decepciones.
Gracias a las personas que conocí
y aquellos que siempre quise conocer,
pero nunca nos dimos la oportunidad de ser.
Gracias a los corazones que me amaron
y aquellas personas sin corazones que me hicieron odiarme
o haciéndome sentir bastante insegura sobre mí.
Gracias a reloj descompuesto
y mi calendario lleno.
Pasé mucho tiempo escribiendo sobre mi dolor
sin darme cuenta que yo también dañaba,
así que he estado escribiendo sobre mis errores y arrepentimientos.
Gracias a mis amores perdidos
y aquellos sentimientos que me hicieron ganar heridas.
Gracias a mis amistades intactas
y a mis amigas que me permiten estar herida.
Gracias a todo lo que pasé
y aquello que jamás fue.
Gracias a ti
por estar aquí.
La pluma era demasiado suave,
necesitaba algo más fuerte para cubrir mis heridas,
algo como la oscuridad de la tinta.
Cuando mi imperio cayó
jamás creí construir un rincón poemario,
he formado mi propio hogar,
derrumbé los muros que yo misma había construido,
pero tapicé todas mis paredes con mi poesía.
Cuando mi imperio cayó
jamás creí construir un rincón poemario,
necesitaba solo un espacio para llenar mis vacíos,
necesitaba solo un lugar para estar y adueñarme de mi ser.
Cuando mi imperio cayó
jamás creí construir un rincón poemario,
pero aquí estoy
y te dejé entrar.
Dejaré esta canción aquí:
We gather here, we line up, weepin' in a sunlit room and if I'm on fire, you'll be made of ashes, too. Even on my worst day, did I deserve, babe, all the hell you gave me? 'Cause I loved you, I swear I loved you 'Til my dying day / I didn't have it in myself to go with grace and you're the hero flying around, saving face and if I'm dead to you, why are you at the wake? Cursing my name, wishing I stayed, look at how my tears ricochet / We gather stones, never knowing what they'll mean some to throw, some to make a diamond ring, you know I didn't want to have to haunt you but what a ghostly scene, you wear the same jewels that I gave you as you bury me/ And I can go anywhere I want anywhere I want, just not home and you can aim for my heart, go for blood but you would still miss me in your bones and I still talk to you (When I'm screaming at the sky) and when you can't sleep at night (You hear my stolen lullabies) / I didn't have it in myself to go with grace and so the battleships will sink beneath the waves, you had to kill me, but it killed you just the same cursing my name, wishing I stayed, you turned into your worst fears and you're tossing out blame, drunk on this pain crossing out the good years and you're cursing my name, wishing I stayed look at how my tears ricochet
Eres más fuerte de lo que se cree. Eres una persona que ha sabido salir adelante luchando contra mil adversidades. Alguien que supo aprovechar cada tropiezo para convertirlo en arte, alguien que con solo contar un papel y tinta hace más creaciones y más maravillas de lo que se puede imaginar.
Me honra el saber que fui una parte para motivarte a escribir poesía (aunque tú ya escribías).
Ojalá en algún momento se pudiera superar o que no duela, todo eso que entre varias personas te hicimos sentir. Tú eres más que eso, tú eres más que cualquier persona que no te ha sabido valorar, no los necesitas Te tienes a ti, principalmente, y a varias personas a las que…