Si tuviera que contar los días
me perdería porque he complicado mi vivir desde el primer día.
Si tuviera que contar los meses
entonces serían 46 meses.
Si tuviera que contar los años
entonces serían casi los 4 años.
Si tuviera que contar el tiempo
entonces serían 3 años con 10 meses.
El tiempo no explica nada,
me hace entender desde cuando
pero no sé como ha pasado
o que me ha obligado a hacer,
quien he dejado de ser.
El tiempo solo servirá para mentir,
pero no hay una cifra que pueda medir el sufrimiento de este largo tiempo.
Me aferré a las lágrimas
y no quise soltarlas,
solo sé que se resbaló una
y desde entonces no sé cuantas han caído.
Me he rotó en llanto varias veces
y no sé que he quebrado tratando de calmarlo.
Han pasado demasiadas cosas
y a la vez, nada.
Demasiados días desperdiciados
tratando de revivir una vida,
pero esa vida nos hizo vivir y amar.
Dicen que el tiempo todo lo cura
y es una locura pensarlo.
Le hemos dado demasiado control al tiempo
y cada momento que pudimos vivir pierde el poder.
Si tuviera que contar el tiempo
diría lo que el calendario marca,
incluso las horas que el reloj nos susurra con sus manecillas.
Pero no,
la vida no se vive por tiempos,
es por los momentos bien vividos,
y he pensado que mi vida es mala
desde tu tragedia.
Puedo decir cuantos días han pasado,
pero sé que he estado más muerta que viva desde todo este tiempo.
No sé cuantos días he estado observando a la ventana
esperando que pases para quedarte,
cuantos zapatos he confundido al confiar en tus pasos.
No sé cuantos días he tomado una flor
y me he aferrado a su espina,
no soy masoquista
pero me pinché y sonreí.
Tú eras el color de las flores
y quien las hacía florecer,
solo nacían para admirar tu vida.
He hecho un río con mis lágrimas
y me he alejado demasiado de casa.
Mi corazón se ha roto demasiadas veces
y tu abrazo era el mejor lugar para estar,
pero no eres ya al lugar que corro,
quizá eres por quien huyo.
Si tuviera que decir el día que te fuiste,
acertaría al decir que fue el 24 de agosto,
pero dejaste de estar antes de marcharte.
Todo lo diga será insuficiente,
pues tú has sido nuestro todo.
Hasta el cielo se rompió en llanto
y mi mundo ese día se cayó,
tomé la pieza que era
y solté el rompecabezas que solíamos formar.
No diré que nos rompiste,
tú solo tratabas de arreglar tu dolor
y eso fue, dejar de sentir,
dejar de existir.
El 24 fue difícil,
el 25 fue peor,
siguieron los días
y nosotros complicamos nuestra vida.
Si tuviera que decir el tiempo que estuve junto a ti
no diría nada sobre el amor que siento,
el corazón no se puede medir,
solo puede hacernos sentir el amor.
Un segundo junto a ti
era tener un amor eterno.
Una vida junto a ti
era jamás desear la muerte.
Un día sin ti
era un año sin lluvia,
una alegría sin risa,
una sonrisa sin chispa.
Un mes sin ti es
no saber que hacer,
dejar de ser,
marchitarnos
y extinguirnos.
Un año sin ti
fue no querer celebrar nada especial,
o festejar pero con huecos,
fue que el calendario no hubiera anotaciones
y los días solo nos marcaran las huellas que dejaste.
Fueron otros cumpleaños
deseando que estuvieras celebrando.
Fue una navidad
con comida en la mesa
y el árbol con regalos,
la noche más importante para ti
sin el abrazo para especial para mí.
Fue demasiado
y a la vez una nada.
Pero aquí estás,
te puedo sentir sin tacto,
te puedo amar porque mi corazón late
aunque a veces se deshace.
sé que me proteges de todo y de todos.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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