Tu fantasma no me atormenta más,
mi alma volvió a ser mía.
Puedo saber lo que sea de ti
y mis latidos parecen que jamás te conocieron.
Todo volvió a su lugar
como si fuéramos partes de un rompecabezas,
somos piezas de distintos rompecabezas.
Todo volvió a su lugar,
tal vez no estoy en el lugar donde debo estar,
pero ya no estoy esperando unos pasos.
Todo volvió a su lugar,
ya no quiero estar a tu lado
ni encontrarte de casualidad.
Todo volvió a su lugar
y no lamento lo que quedó atrás.
Hace unos días un amigo me preguntó por ti,
él dijo que no te había olvidado, pero yo sí.
Me sorprendió su pregunta,
pero a él le sorprendió más mi respuesta,
esperaba una buena historia
o una poesía,
así que estoy haciendo una,
pero debo ser honesta,
ninguna de las últimas poesías que te he hecho me han gustado,
ni siquiera sé por que las escribo,
no es escribir solo porque sí,
supongo que aún hay cosas que necesito decir
y creo que aún no las he expresado.
No me cuesta hablar de ti,
solo que ya no tengo nada que decir.
Puedo decir tu nombre
sin que se me trabe la lengua,
tiemblen mis labios
o mi corazón se acelere,
eres un nombre más,
una poesía más
como las que se llaman “sin título”.
Lánzame al infierno si quieres,
pero ni con las llamas de él
se encenderá esto.
He vuelto a escuchar algunas canciones
que por tu culpa dejé de escuchar
y realmente prefiero cualquier canción
que escuchar tu voz.
He vuelto a ser libre,
nada me ata,
no hay nada de ti en mí.
Sé que tienes ojos cafés,
como todos los que me han gustado,
aunque no recuerdo su tono.
Mi memoria ha estado fallando,
pero el perderla contigo ha sido acertar.
Parece como si nunca hubieras existido,
pero no está en mi llenarte de vida.
Ojos cafés,
beberé un café en cualquier lugar
sin buscarte con la mirada por si pasas.
Solo estarás en mi poesía,
en hojas amarillas
llenas de flores marchitas.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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El olvido llega
y ya no duele el recordar.
La mente y el corazón
se prepara para cuando
alguien más puede llegar.
Tu mereces conocer la felicidad
y llegará a ti.