Necesito de aquel abrazo
que no me darás.
Necesito de aquellas palabras
que no me dirás.
Necesito de tu presencia,
pero solo tengo tu ausencia.
El tiempo pasará
pero tú no volverás,
te marchaste en silencio
sin mirar atrás.
Te llevaste una gran parte de mí,
en donde estaban mis sueños,
mis fuerza, mi felicidad,
mi esperanza, mi fe,
mi todo…
me dejaste el frío de tu partida.
Cuando te fuiste llovió,
ahora quien llora soy yo.
Te fuiste sin despedirte,
no me enseñaste a como seguir,
no me diste motivos para vivir así,
no me diste tu adiós,
pero me dejaste un gran dolor.
Tengo nuestros recuerdos
de todos aquellos momentos
que sucedieron.
Me dejaste con tantas palabras
queriendo ser pronunciadas,
con miradas por cruzar,
con abrazos que dar,
con un amor en mi corazón
y un dolor sin control.
Ahora mis miradas son vacías,
las palabras son silenciosas,
los abrazos son sin sentir,
las sonrisas son fingidas,
las risas son forzadas,
mi corazón está sin amor.
Tú eres quien puede curar mi dolor,
solo tú puedes sanar éste corazón,
llena tus vacíos,
abrázame como solías hacerlo,
solo así sentiré algo
en vez de todo éste dolor.
Quisiera despertar de esta pesadilla
y soñar cosas bonitas,
quiero despertar
y al abrir mis ojos
mirarte aquí para mí,
diciéndome que todo fue un mal sueño
y tendremos los mejores momentos.
Me dejaste alrededor de la nada,
en los laberintos,
así que me perdí
porque para cualquier camino
tú eras mi guía.
Vivo instantes de alegría,
junto a ti eran horas de alegría,
sonrisas y risas.
Contigo lloraba por minutos,
ahora lloro hasta quedarme dormida.
Tu partida fue lo más difícil que he enfrentado,
conocerte fue lo mejor que me ha pasado.
Sé que eres mi ángel
y estas cuidando de mí
desde ahí
pero te necesito aquí.
Me proteges de todo y todos,
pero no tienes el control
de protegerme de mi misma.
Hazme cambiar de opinión,
dame las fuerzas para continuar,
cúrame hasta sanarme y salvarme.
Tus palabras las tengo en mis pensamientos
pero mis oídos necesitan escuchar tu voz
una vez más,
tatuaré en mí lo que me digas.
Perdón por el desastre que soy hoy,
el dolor me cambió y mató,
el dolor por tu partida,
el dolor de mi vida.
Te perdí a ti
y me perdí a mí
tratando de buscarte
pero encontré todos mis recuerdos
pero en ningún momento estabas,
recordé el mal, las heridas,
todo el mal que me habían hecho
pero tú habías curado,
pero ahora que no estas,
no sé como defenderme.
Te fuiste en un día lluvioso
y mi vida se hizo una tormenta
donde por cada gota me ahogaba.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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