Donde antes había mil nudos en mi garganta
ahora solo queda dolor.
Estoy harta de estar tirada en el piso de mi baño,
estuve los últimos días acostada en mi cama.
Estoy harta de recoger mi cabello
cuando igual luce como un desastre.
Estoy harta de estar tirada en el piso de mi baño
y recoger mi cabello
mientras debería de limpiar mis lágrimas,
estoy harta de vomitar,
ni siquiera recuerdo que comí,
me sentía tan vacía
que me sorprendió que aún quedara algo en mí.
Odio vomitar
y llorar cuando lo hago,
la sensación que queda después en mi garganta raspada,
me está lastimando.
J no me creería si le dijera que yo no provocó esto,
él siempre intentó de ver lo malo de mí,
espero que no malinterpretes esto,
él confiaba que estaría bien, algún día.
Él engañó a todas las chicas con las que estuvo
pero yo no lo podía engañar,
él siempre sospechaba cuando las cosas iban mal
y me acompañaba hasta que las cosas se calmaran.
Manché mi ropa con el vómito,
¿algún día estaré limpia de mis desastres?
Donde antes había mil nudos en mi garganta
ahora solo queda dolor.
No sé que sentir con respecto de mí,
mi aspecto demacrado no ayuda en nada.
Estuve despertándome temprano estos días,
se agotaron los sueños y el sueño,
pero me siento cansada todo el tiempo.
Tengo semanas con una cierta duda,
mi existencia está en deuda.
Me he negado a llorar,
porque solo lo hago cuando no puedo más
y aún no es tiempo para rendirme,
sea de lo que sea que esté hablando.
Odias que mis huesos estén siempre expuestos,
porque estoy siendo vulnerable ante ellos.
Odias la dureza de mi caparazón,
pero más a lo débil que soy.
Sabes lo difícil para mí que es ir a comprar ropa, solo a veces,
pero nunca siento que encajo y me suelo romper,
lo difícil no ha sido el cuerpo que me tiene,
sino lo que he perdido en mi ser.
Mi hermano siempre dice que estoy cerca de la muerte,
¿es su manera de decir que está preocupado por lo mal que suelo estar?
Odio estar bajo de mi peso
y realmente me baja los ánimos el no haber podido subir aquellos kilos,
todo este asunto solo me vuelve inestable por no tener control de mí.
Todas dicen que soy afortunada porque Andrés me deja descansar,
no saben lo horrible que fue el año pasado estar un mes sangrando y el otro seguir herida, pero sin sangre derramada, y así, los 12 meses, solo 6 veces.
Mis retrasos nunca han sido de días o semanas, sino meses
y es así como siempre estoy en espera de algo que nunca llega.
Oh, he hecho un enredo en mí,
pero desate los nudos de mi garganta al fin.
Realmente no sabía si subir esta poesía o no, ya que jamás me había sentido tan vulnerable en mi vida o poesías, pero prometí ser real/abierta. Aunque yo no provoco mi vómito eso no me hace sentir mejor, sé que hay algo mal en mí, más emocional que físico. De este episodio sé que pudo provocarlo, necesito trabajar más en mí, por mí.
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Mi muñequita, me duele toda esta situación, es una gran impotencia no poder hacer nada, intento tanto, pero no lo consigo.
Siempre será importante dejar salir lo que está dentro de nosotros, y el llorar no es malo. Las lágrimas te van liberando poco a poco, pero también se necesita hablarlo y escuchar.
Te amo mi niña. Eres fuerte, hay momentos que te debilitan, pero tú ganaras.